Según la leyenda y la inscripción que hay al pie de la esfinge de Gizhé, fue el dios Harmakhis el que se apareció al príncipe que había de ser Thutmosis IV, mientras dormía a la sombra de la esfinge, pidiéndole que, cuando fuera rey, le librara de las arenas que aprisionaban su cuerpo. Por ello, se consideraba que la esfinge era una imaen de este dios; no obstante, parece ser que dicha inscripción, fue grabada con posterioridad a la construcción de la esfinge.
Este dios fue posteriormente identificado con Ra-Harmakhis, dios solar de Heliópolis y fue adorado en el gran templo dedicado a Horus en Edfú.
-Mitologías de Antiguo Egipto, Miguel Boladeras.
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